14 de marzo de 2013

Te pedi una sola cosa: que no mintieras. Y en lo unico que pensaste fue en mentiras. Día tras día, segundo a segundo. A veces me pongo a pensar en si no tenías una pizca de arrepentimiento cada vez que me jurabas "no te estoy mintiendo". ¿No crees que hubiera sido mejor evitar las promesas? ¿No te causé absolutamente nada, que seguiste haciéndolo sin remordimientos?
Fuiste una mentira desde el primer día, desde la primera vez que me dijiste "hola" y desde el primer "te amo". Ahora entiendo todo. Entiendo las excusas, entiendo los enigmas, entiendo la desconfianza. Entiendo que creiste que iba a ser lo suficientemente estúpida para creerte cualquier cosa que dijeras. Lo creiste bien, por un tiempo. Pero ya no te creo y, aunque ya esté rota por dentro, no voy a dejar que me sigas destruyendo.

3 comentarios:

  1. Ojo. A pesar de que sean mentiras, hay mentiras lindas. Yo viví una mentira de amor, que con el paso de los años me mostró que era verdadera. Dale tiempo, dale aire, que todo con su tiempo vuelve al lugar que tiene que estar.

    Mua

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  2. your blog looks very lovely and interesting. im glad if you visit my blog, too<3 keep in touch!

    xx
    beauthi.blogspot.com

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  3. no tienes que hacerlo! nadie tiene el derecho de mirarnos a los ojos y seguirnos mintiendo sin más..puede que sean mentiras"blancas" pero son mentiras y punto! a mi no me sirven :(
    hermosa pero triste entrada!
    PD: te invito a que te pases por mi blog y si te gusta me ayudas con un reto que tengo?
    mil graciias
    un beso;;*

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